Bioetanol | En cuatro meses el NOA perdió $ 785 millones

Por los manoseos del precio hay una transferencia brutal de recursos a las petroleras.

Des­de mar­zo últi­mo, por el cam­bio de las reglas fijadas para estable­cer el pre­cio del bioetanol, el sec­tor sucroal­co­holero de Salta, Jujuy y Tucumán perdió más de $785 mil­lones, pre­cis­aron fuentes del Cen­tro Azu­carero Argenti­no a El Tri­buno.

Recientes declara­ciones del sec­re­tario de Energía de la Nación, Gus­ta­vo Lopetegui, pusieron en claro que el bioetanol y el biodiésel dejaron de ser pro­duc­ciones pro­mo­cionadas por ley y bien con­sid­er­adas por el Gob­ier­no. “El sec­tor de bio­com­bustibles está sien­do ben­e­fi­cia­rio de sub­sidios y ten­go mis dudas de que ten­ga algún ben­efi­cio en la suma que lo merez­ca”, sos­tu­vo el tit­u­lar de Energía, luego de que la Jus­ti­cia Fed­er­al de Jujuy obligara al organ­is­mo a recono­cer a Bio Ledes­ma, la des­til­ería del inge­nio homón­i­mo de Jujuy, un pre­cio más razon­able por el etanol entre­ga­do a YPF y otras petrol­eras.

En abril, tras man­ten­er plan­cha­do el val­or del bio­com­bustible que se mez­cla con las naf­tas con un corte oblig­a­to­rio del 12%, la cartera de Energía desac­tivó los pro­ced­imien­tos que esta­ban acor­da­dos para actu­alizar los pre­cios de entre­ga del bioetanol en base a los cos­tos de pro­duc­ción.

Por la dis­cre­cional­i­dad de las deci­siones admin­is­tra­ti­vas, en lugar de los $26,240 que cor­re­spondían por litro de acuer­do con la fór­mu­la anu­la­da, los inge­nios que par­tic­i­pan de los cupos asig­na­dos para el bioetanol de caña reci­bieron en mar­zo $22,547. Ese mes el vol­u­men total entre­ga­do por Taba­cal (hoy Seaboard), San Isidro y otras ocho des­til­erías habil­i­tadas en Jujuy y Tucumán fue de 45.585 met­ros cúbi­cos, por lo que el manoseo nor­ma­ti­vo le restó $168.345.405 a un sec­tor agroin­dus­tri­al que sostiene 50.000 empleos direc­tos y otros 200.000 indi­rec­tos en la región. Y todo para ben­efi­cio de un puña­do de petrol­eras que amplían sus már­genes de ganan­cias con el bajo pre­cio del etanol que, por cier­to, no se refle­ja en los sur­tidores de naf­ta.

  • 42,7 por cien­to aumen­tó el bioetanol de caña des­de octubre de 2017. Entonces las refin­erías del NOA lo entre­ga­ban a las petrol­eras a $16,873 el litro y hoy vale $24,073.
  • 96,4 por cien­to aumen­tó la naf­ta súper de YPF des­de octubre de 2017. Entonces esta­ba a $21,710 (con un dólar de $17,65) y hoy cues­ta $42,640 en Bs. As. (con el dólar a $45,70).

En abril, en lugar de los $27,039 que cor­re­spondían en fun­ción de la fór­mu­la desecha­da, las petrol­eras pagaron $22,732 por cada litro de etanol. Con 43.729 met­ros cúbi­cos entre­ga­dos ese mes, la trans­fer­en­cia de recur­sos ascendió a $188.340.803.

En mayo, cor­re­spondían por el ajuste de cos­tos pro­duc­tivos $28,095 por litro, pero Energía estable­ció dis­cre­cional­mente un pre­cio de entre­ga de solo $23,409. Con 44.724 met­ros cúbi­cos despacha­dos el mes pasa­do, la economía region­al del NOA resignó otros $209.576.664 ante el lob­by petrolero.

Este mes, con una asi­gnación de 42.406, la activi­dad que ve peligrar inver­siones y puestos de empleos en tres provin­cias norteñas perderá otros 218.814.960, porque en lugar de los $29,230 que cor­re­spondían en base a los cos­tos reales de pro­duc­ción, la Sub­sec­re­taría de Hidro­car­buros estable­ció para junio un pre­cio de $24,073.

Blanco sobre negro

Lopetegui cues­tionó a los bio­com­bustibles porque, a su enten­der, “están sub­sidi­a­dos”. El pres­i­dente del Cen­tro Azu­carero, Hernán Mau­rette, aclaró que esa defini­ción con­cuer­da más con la actu­al­i­dad de la Cuen­ca Neuquina que con la real­i­dad del sec­tor sucroal­co­holero del NOA. “El gob­ier­no sub­sidia de man­era conc­re­ta a Vaca Muer­ta, que es un desar­rol­lo impor­tante, pero que gen­era impacto ambi­en­tal y sobre eso no parece haber pre­ocu­pación”, recal­có Mau­rette. A esto habría que agre­gar que, tal como lo anticipó este diario en 2017, el pre­cio sub­sidi­a­do para el “shale gas” de Vaca Muer­ta operó como un tiro de gra­cia para la hun­di­da pro­duc­ción gasífera de Salta.

El tit­u­lar de Energía tam­bién sugir­ió que la pro­duc­ción de bioetanol “no paga impuestos”.

Un estu­dio elab­o­ra­do por Jorge Fei­joó, exmin­istro de Desar­rol­lo Pro­duc­ti­vo de Tucumán, demostró que el impacto impos­i­ti­vo de los bio­com­bustibles es del 35% en Brasil y del 38% en Argenti­na.

Des­de el Cen­tro Azu­carero se aclaró que la activi­dad petrol­era trib­u­ta menos IVA que los inge­nios. Estos, además, pagan ingre­sos bru­tos por sus insumos, pro­duc­tos, ser­vi­cios y por las propias ven­tas de etanol a las petrol­eras.

El impuesto a la trasfer­en­cia de com­bustibles (ITC), que se atribuye como supues­ta car­ga a las petrol­eras, es afronta­do por el con­sum­i­dor en los sur­tidores.

En los país­es desar­rol­la­dos se paga un impuesto al car­bono por con­t­a­m­i­nar; en Argenti­na no. Brasil lanzó el Ren­o­va bio, que no tiene cos­to fis­cal, pero lo pagan los gen­er­adores de gas­es de efec­to inver­nadero (GEI).

Cal­i­for­nia, en Esta­dos Unidos, tiene la Low Car­bon Fuel Act, que pre­mia el uso de etanol de caña, por su bajo impacto en el cam­bio climáti­co en toda la cade­na de val­or.

En su eno­jo, Lopetegui sugir­ió que los bio­com­bustibles son “un lujo” para país­es ricos. Hoy lo usan con inteligen­cia naciones ric­as y pobres: Esta­dos Unidos, Brasil, Bolivia, Paraguay y otros 40 país­es.

La balanza energética

El pres­i­dente de YPF, Miguel Gutiér­rez, declaró en la Unión Indus­tri­al Argenti­na que “con Vaca Muer­ta se equi­li­bra la bal­an­za energéti­ca. No nece­si­ta­mos bio­com­bustibles, expor­ta­mos petróleo e impor­ta­mos naf­ta”, dijo.
Gutiér­rez descono­ció que la bal­an­za es del país, no de Energía. Hay que expor­tar más para gener­ar divisas e impor­tar para el crec­imien­to.

Cambio climático

Fun­cionar­ios nacionales pare­cen haber olvi­da­do que el Con­gre­so san­cionó la ley de bio­com­bustibles en 2006, entre otras cosas, por los com­pro­misos inter­na­cionales que asum­ió Argenti­na en la reduc­ción de las emi­siones de gas­es con efec­to inver­nadero.
El bioetanol, al que mal se cul­pa por las subas en los sur­tidores y la inflación, emite un 70% menos de gas­es de efec­to inver­nadero que la naf­ta.
Vaca Muer­ta puede con­sid­er­arse una fuente de ingre­sos para el país, pero ¿es razon­able, como plantea Gutiér­rez, impor­tar con­t­a­m­i­nación?
El pres­i­dente Don­ald Trump, quien descree del cam­bio climáti­co, aca­ba de apro­bar un corte oblig­a­to­rio de bio­com­bustibles del 15%, para todo el año, en Esta­dos Unidos.

Fuente: El Tri­buno.