Confirmado: el ingenio San Isidro reabrirá sus puertas la otra semana

La histórica firma, ahora con nuevos dueños, se propone llevar adelante la zafra 2018 en el menor tiempo posible y trabajando con todo el personal que haga falta.

El inge­nio que fue desahu­ci­a­do por sus antigu­os dueños hace aprox­i­mada­mente ocho meses, reini­cia­rá sus activi­dades en el tran­scur­so de la próx­i­ma sem­ana.

Se tra­ta de la úni­ca empre­sa en el país que luego de haber sido cer­ra­da y de haber des­pe­di­do a la total­i­dad de su per­son­al, reabre sus puer­tas y comien­za a nue­va­mente a pro­ducir nor­mal­mente.

Durante el últi­mo tiem­po de nego­cia­ciones donde se puso en juego la ven­ta de la empre­sa, hubo mucho her­metismo y aun hoy, cuan­do ya se sabe quiénes son sus nuevos dueños, existe poca infor­ma­ción, entre otras cosas, sobre la fecha de reini­cio de la activi­dad azu­car­era y el ingre­so del per­son­al.

Bocana­da de aire fres­co

Sobre esta reaper­tu­ra, el Sec­re­tario Gen­er­al del Soeasi Mar­i­ano Cuen­ca expresó: “La reaper­tu­ra del inge­nio más antiguo de la Argenti­na es una bocana­da de aire fres­co para todo el depar­ta­men­to de Gen­er­al Guemes y para toda la provin­cia de Salta, la que fue logra­da tras ocho meses de lucha en unidad de los tra­ba­jadores azu­careros con el apoyo acti­vo de todo el movimien­to obrero salteño y de las autori­dades provin­ciales tam­bién”.

Cuen­ca agregó que “una multi­na­cional extran­jera lo cer­ró y una empre­sa argenti­na invir­tió para su reaper­tu­ra: eso ya de por sí es pos­i­ti­vo”.

“Ya está prác­ti­ca­mente todo lis­to para el ini­cio de la zafra 2018, lo que es moti­vo de ale­gría para tra­ba­jadores y población en gen­er­al, porque de haber desa­pare­ci­do el prin­ci­pal polo pro­duc­ti­vo de la zona, la situación social y económi­ca de la región hubiese sido insostenible, espe­cial­mente en el mar­co de cri­sis pro­fun­da que padece nue­stro país a causa de un mod­e­lo políti­co, social y económi­co que lle­va ade­lante el Gob­ier­no nacional con el apoyo implíc­i­to y explíc­i­to de quienes deci­dieron ser sus socios en el des­guace del Esta­do nacional y la vul­neración de los dere­chos adquiri­dos de los tra­ba­jadores”.

Avan­zar hacia un país mejor

El diri­gente azu­carero agregó que “en Cam­po San­to ‑local­i­dad donde está ubi­ca­do el inge­nio- hemos demostra­do medi­ante el diál­o­go per­ma­nente y la defen­sa fér­rea de las economías regionales, que se puede avan­zar hacia un país mejor para sus habi­tantes medi­ante un mod­e­lo de pro­duc­ción nacional, recu­peración y creación de puestos de tra­ba­jo, con sol­i­dari­dad, la unidad de todos y lucha”.

“No fue el Fon­do Mon­e­tario Inter­na­cional ni sus per­son­eros locales quienes posi­bil­i­taron que el Inge­nio San Isidro volviera a fun­cionar. Por el con­trario, fuimos los tra­ba­jadores, las orga­ni­za­ciones sindi­cales y sociales, y diver­sos sec­tores que no se res­ig­nan al desam­paro, la des­ocu­pación y la mis­e­ria de las may­orías”, agregó Cuen­ca, y agregó que “aho­ra sí podemos decir que ten­emos pre­sente y ten­emos futuro”.

El día “D” es el lunes

El comien­zo de la zafra 2018 en Cam­po San­to está pre­vis­to para el próx­i­mo lunes 17, aunque no hubo especi­fi­ca­ciones sobre el ingre­so del per­son­al.

Pero se sabe que la nue­va empre­sa a car­go de la fábri­ca estu­vo real­izan­do incor­po­ra­ciones en base a las necesi­dades más urgentes para cumplir las tar­eas que se enfrentarán de aho­ra en más en la zafra 2018.

Basa­dos en la expe­ri­en­cia de algunos extra­ba­jadores, se cal­culó que el total de cam­pos cul­ti­va­dos con caña de azú­car que aun están disponible com­pren­derían unas 5.000 hec­táreas en todo el depar­ta­men­to Gen­er­al Guemes, de las cuales 3.500 pertenecen al inge­nio y el resto serían de cañeros inde­pen­di­entes.

Proce­sar esas cañas deman­daría un tiem­po total de tres meses y, al menos, la incor­po­ración de 200 tra­ba­jadores en la fábri­ca.

La can­ti­dad de mano de obra en el cam­po, por su parte, estaría depen­di­en­do de la can­ti­dad de camiones y máquinas cosechado­ras en mar­cha y se podría esti­mar en 150 per­sonas.

Cabe la aclaración que estos datos no son ofi­ciales y solo sur­gen del aporte de per­sonas que estu­vieron algu­na vez vin­cu­las al inge­nio.

Fuente: El Tri­buno.