SANTA FE — Lifschitz firmó el convenio por el cual los colectivos urbanos usarán biodiesel

Fue ayer en Buenos Aires. El 23 por ciento de los gases con efecto invernadero que se generan en Rosario son producidos por los ómnibus.

Una parte —pequeña— de la soja que se va por los puer­tos santafesinos al mun­do (como poro­to o aceite) será con­sum­i­da en Rosario. Y no como ali­men­to. Con­ver­ti­da en biodiesel, actu­ará como com­bustible para el trans­porte urbano de pasajeros. El proyec­to Bio Bus, resul­ta­do de la inves­ti­gación y el impul­so del gob­ier­no provin­cial, arran­ca por seis meses, a modo exper­i­men­tal. Si todo fun­ciona bien, los ben­efi­cios serán a tres ban­das; económi­co (susti­tuye com­bustible fósiles), social (robus­ta gen­eración de empleo) y ambi­en­tal. El 23 por cien­to de los gas­es con efec­to inver­nadero que se gen­er­an en Rosario, son obra y arte de los colec­tivos urbanos.

Son 16 empre­sas con sede en la provin­cia de San­ta Fe las que gen­er­an el 80 por cien­to de la pro­duc­ción nacional de biodiesel. Emplean de man­era direc­ta a 671 per­sonas; y aho­ra se les abre una opor­tu­nidad de crec­imien­to: 400 unidades del trans­porte urbano de la ciu­dad usarán biodiesel (25 por cien­to) mez­cla­do con el gasoil tradi­cional como com­bustible. Con un agre­ga­do, dos unidades con motores Euro 5 y Euro 3, serán ali­men­ta­dos con 100 por cien­to de biodiesel.

El gob­er­nador Miguel Lif­schitz eligió ayer uno de los salones de la Sociedad Rur­al de Buenos Aires para fir­mar el con­ve­nio jun­to a la Cámara Argenti­na de Bio­com­bustibles (Car­bio) y la Cámara de Empre­sas Pymes Regionales Elab­o­rado­ras de Bio­com­bustibles (Cepreb). La ini­cia­ti­va podrá ver la luz, en gran medi­da, por el sis­tema de trans­porte que dis­eñó Rosario a través de las empre­sas de gestión estatal, Sem­tur y Mix­ta.

“Las empre­sas hicieron inver­siones pen­san­do en expor­tar, además del mer­ca­do inter­no, pero nos fueron ponien­do bar­reras en Esta­dos Unidos, el prin­ci­pal cliente. Entonces bus­camos alter­na­ti­vas y hoy ponemos en mar­cha esta expe­ri­en­cia, que podría ser repli­ca­da en otras ciu­dades de la Argenti­na, en el trans­porte de larga dis­tan­cia, y even­tual­mente tam­bién en los auto­mo­tores par­tic­u­lares”, anun­ció el gob­er­nador.

Si todo el trans­porte urbano de la Argenti­na tomara igual modal­i­dad que Rosario, apli­can­do un litro de biodiesel por cada tres de gasoil, la total­i­dad de la pro­duc­ción de biodiesel actu­al sería con­sum­i­da por el mer­ca­do inter­no.

Leg­is­lación

La primera la ley nacional (26.093) que pro­movió la pro­duc­ción de bion­ergía en la Argenti­na, en 2006, estable­ció el “rég­i­men de reg­u­lación y pro­mo­ción para la pro­duc­ción y uso sus­tentable de bio­com­bustibles”, por un perío­do de 15 años. Tuvo por obje­ti­vo “pro­mover la pro­duc­ción y uso de bio­com­bustibles (biodiesel, bioetanol y biogás) en el ter­ri­to­rio nacional fomen­tan­do la par­tic­i­pación del sec­tor agropecuario y de la pequeña y medi­ana empre­sa”.

San­ta Fe fue la primera provin­cia en san­cionar su propia ley de energías ren­ov­ables, tam­bién en 2006. “Rég­i­men de pro­mo­ción de energías ren­ov­ables no con­ven­cionales”, que otor­ga exen­ciones, reduc­ciones o difer­im­ien­to de trib­u­tos provin­ciales a los emprendimien­tos ded­i­ca­dos a pro­ducir este tipo de energías que se instal­en en el ter­ri­to­rio provin­cial”.

La cer­razón de los mer­ca­dos inter­na­cionales, en los últi­mos dos años, pusieron en ries­go a las empre­sas santafesinas. El proyec­to Bio Bus recu­pera la expec­ta­ti­va, aho­ra vía con­sumo inter­no.

Fuente: La Cap­i­tal