CHACO | Ministra de Capitanich paga $85 el azúcar, $590 la yerba y $745 el café

El Ministerio de Educación concretó una compra de mercadería con excesivos sobreprecios.

Tras las polémi­cas com­pras con sobre­pre­cios del área de Gob­er­nación y del oneroso ser­vi­cio de lunch que pagó el Min­is­te­rio de Desar­rol­lo Social de la Provin­cia, se supo aho­ra que la min­is­tra de Edu­cación, Daniela Tor­rente, con­cretó una adquisi­ción de artícu­los ali­men­ti­cios y de limpieza que refle­jan mon­tos muy por enci­ma de los con­tem­pla­dos en el pro­gra­ma de Pre­cios Máx­i­mos.

Así, por ejem­p­lo, el Min­is­te­rio de Edu­cación pagó 590 pesos por un paque­te de yer­ba mate, sin palo, de primera mar­ca; $95 por una caji­ta de té en saquitos de 20 unidades, y 85 pesos el paque­te de un kilo de azú­car.

Además, en la mis­ma com­pra, la cartera educa­ti­va abonó 135 pesos por una caja de mate coci­do en saquitos; 235 pesos por una caja de café en saquitos de 20 unidades, y la escalofri­ante suma de 745 pesos por un fras­co de café instan­tá­neo de 200 gramos.

Todos estos mon­tos son muchísi­mo más ele­va­dos que los deter­mi­na­dos en el pro­gra­ma Pre­cios Máx­i­mos, que aho­ra fue exten­di­do por el Gob­ier­no nacional. Allí, la yer­ba más cara es la Playa­di­to, a $238, en tan­to que el té en saquitos más caro es el Taraguí espe­cial de 50 saquitos, a $70. Asimis­mo, el paque­te de azú­car Ledes­ma Pre­mi­um está a $56, mien­tras que el café en saquitos La Vir­ginia, por 20 unidades, está a $127.

Otro pun­to lla­ma­ti­vo es que el provee­dor es un mul­ti rubros que se ded­i­ca a múlti­ples ser­vi­cios, tales como artícu­los de bazar y mena­je; artícu­los de limpieza; artícu­los de deportes y atletismo; artícu­los de elec­t­ri­ci­dad; artícu­los de elec­tróni­ca, fer­retería, artícu­los del hog­ar, bebidas, comestibles, equipamien­to para ofic­i­nas; com­putación e infor­máti­ca, equipos de com­putación, acce­so­rios e insumos; aparatos de orto­pe­dia; instru­men­tal médi­co, próte­sis, e instru­men­tal odon­tológi­co, y otros.

Fuente: Dat­aCha­co.