Cansado de los cambios, se fue un hombre fuerte en biocombustibles

Cansa­do de los cam­bios con­stantes de los jefes, la fal­ta de recur­sos para armar equipos y de la pre­sión de las provin­cias pro­duc­toras de biodiesel, Agustín Tor­ro­ba renun­ció a su car­go como direc­tor de Bio­com­bustibles en la Sec­re­taria de Energía, hoy a car­go de Gus­ta­vo Lopetegui.

Fuentes del entorno del aho­ra ex fun­cionario señalaron a BAE Nego­cios que a Tor­ro­ba le pre­ocu­pa­ba la “fal­ta” de “recur­sos” para armar equipos y en par­tic­u­lar esta­ba “cansa­do” de los “cam­bios” con­stantes de “jefes”, algo que no le per­mitía estable­cer un vín­cu­lo a la hora de lle­var ade­lante un plan efec­ti­vo en pos de los bio­com­bustibles.

Además, el ex fun­cionario sen­tía la “pre­sión” que recibía de la indus­tria, en espe­cial de las provin­cias pro­duc­toras de biodiésel y bioetanol que bus­can ele­var el corte en su mez­cla con las naf­tas y gasoil, sin que eso sig­nifique la creación de un nue­vo impuesto, algo pre­tendi­do por el ex sec­re­tario, Javier Igua­cel.

Con la lle­ga­da de Lopetegui, hace ape­nas un mes ‑el 28 de diciem­bre- todo volvió a foja cero. El ex vice jefe de min­istros y asesor pres­i­den­cial recono­ció no saber nada de energía, aunque prometió al pres­i­dente Mauri­cio Macri apren­der del tema lo mas rápi­do posi­ble.

Por lo pron­to, Tor­ro­ba, has­ta ayer a car­go de la oper­a­to­ria y el desar­rol­lo del sec­tor de bio­com­bustibles en el país, pre­fir­ió dar un paso al costa­do.

Naci­do en Bél­gi­ca y cri­a­do en La Pam­pa, el ex fun­cionario viene de una famil­ia rad­i­cal. Su padre, Fran­cis­co Tor­ro­ba, fue diputa­do nacional has­ta 2017, lo que le tendió un puente a la políti­ca y a Cam­biemos, donde encon­tró el apoyo de Ernesto Sanz y Daniel Mon­ta­mat, con quien tra­ba­jó muchos años. No es menor su amis­tad con Daniel Redon­do, de la Fun­dación Pen­sar.

En diciem­bre este diario señaló la pulsea­da que desa­taron ante el Gob­ier­no las provin­cias pro­duc­toras de bio­com­bustibles, que con­for­man la Liga Bioen­ergéti­ca, con una fuerte pre­sión para incre­men­tar el corte en su mez­cla con las naf­tas y gasoil, sin que eso implique la apli­cación de un nue­vo impuesto.

En diciem­bre del año pasa­do hubo ten­siones al respec­to entre el entonces sec­re­tario Javier Igua­cel y los gob­er­nadores. Tras impul­sar su idea de aplicar impuestos al biodiésel y luego dar mar­cha atrás, des­de Energía ya no quisieron respon­der si volverían a la car­ga con el impuesto, pero destac­aron que “la medi­da es bue­na” y que “el lob­by de provin­cias como Tucumán impi­den el pro­gre­so”.

La idea de Igua­cel en su momen­to era la de impon­er vía ley un impuesto para el bioetanol del 74% del mon­to paga­do por las naf­tas. Mien­tras que el biodiésel lle­ga­ba al 92% en su mez­cla con el gasoil.

En ese momen­to, el min­istro de la Pro­duc­ción de Tucumán, Luis Fer­nán­dez, le aclaró a este diario que rec­haz­a­ba de plano el impuesto. “Eso es algo que se debe hac­er con los fósiles, que son los que con­t­a­m­i­nan dióx­i­do a la atmós­fera y no pagan por ello”, dijo.

Con ese telón de fon­do fue que Tor­ro­ba pre­sen­tó ayer su renun­cia a la direc­ción de Bio­com­bustibles y aban­donó el equipo lid­er­a­do por Lopetegui en Energía.

Fuente: BAE Nego­cios