Zafra 2018 | Impacto climático: las heladas bajaron los rindes de la caña

Sergio Belmonte y Gerardo Rengel, del Ipaat, evalúan el avance de la campaña.

“Al comien­zo de la actu­al zafra 2018, pen­sábamos que resul­taría mejor que la ante­ri­or, ya que los análi­sis y diag­nós­ti­cos de cómo esta­ban los cul­tivos al comien­zo del año, pronos­ti­ca­ban que de acuer­do a la caña disponible y los rendimien­tos prob­a­bles, la pro­duc­ción sería supe­ri­or a la de 2017; pero por el impacto de las heladas la zafra empezó a com­por­tarse como la ante­ri­or. Ha sido, además, una zafra exten­sa, sobre todo porque los prob­le­mas de (los inge­nios) San Juan, Nuñor­co y San­ta Bár­bara deter­mi­naron que dejaran de mol­erse casi 900.000 toneladas de caña, que debieron ser mol­i­das por otros inge­nios, comen­tó Ger­ar­do Ren­gel, jefe del área Téc­ni­ca y Oper­a­ti­va del Ipaat (Insti­tu­to de Pro­mo­ción de Azú­car y Alco­hol de Tucumán), quien jun­to a Ser­gio Bel­monte ‑a car­go de la Geren­cia del organ­is­mo- expusieron sus pun­tos de vista respec­to del com­por­tamien­to de la actu­al zafra a pun­to de cul­mi­nar, y en la que solo mue­len Prov­i­den­cia y La Flori­da.

A fines de octubre comen­zaron las llu­vias, que en muchos de los casos fueron muy copiosas y con una gran can­ti­dad de días llovien­do, en todas las áreas cañeras de la provin­cia en donde todavía había caña en pie y la zafra se estancó, arran­can­do de nue­vo después de que los sue­los empezaron a per­mi­tir el ingre­so de las cosechado­ras y los dos inge­nios, describió Ren­gel.

Esta es una zafra casi cal­ca­da a la del año 2017, con un poco más de caña mol­i­da, pero con un poco menos de rendimien­to, lo que expli­ca que a la fecha teng­amos val­ores de ‘azú­car equiv­a­lente’ y ‘físi­co’ sim­i­lares, que no aumen­tarán mucho más de 10.000 toneladas respec­to de las pro­duci­das has­ta el 31 de octubre pasa­do, tenien­do en cuen­ta los rendimien­tos real­mente bajos de los dos inge­nios que actual­mente siguen hacien­do tra­ba­jar a sus trapich­es, dijo Ren­gel.

Un nue­vo análi­sis

Real­mente, las heladas que se dieron en esta zafra cam­biaron el panora­ma traza­do en su momen­to, por lo que des­de el Ipaat tuvi­mos que reanalizar la situación, dijo Ser­gio Bel­monte.

Al 31 de octubre, se lle­van pro­duci­das en Tucumán 1,351 mil­lón de toneladas de azú­car equiv­a­lente, sien­do, de éstas, 1,064 mil­lón de toneladas de azú­car físi­co (875.000 de blan­co y 189.000 de crudo), con un total de caña neta mol­i­da de alrede­dor de los 14,328 mil­lones de toneladas. Tenien­do en cuen­ta ese panora­ma y las esti­ma­ciones del mes de mayo de la Eeaoc, es posi­ble con­cluir que “no se redu­jo sig­ni­fica­ti­va­mente la can­ti­dad de caña, que la Eeaoc estimó en su informe ini­cial” que alcan­zaría como máx­i­mo 14,640 mil­lones de toneladas, pero “sí se reg­istró una dis­min­u­ción de los rendimien­tos”, en parte como resul­ta­do de las heladas, lo que expli­ca que la pro­duc­ción de azú­car equiv­a­lente haya ape­nas super­a­do la esti­mación ‑de mín­i­ma- del organ­is­mo de inves­ti­gación tucumana, de 1,342 mil­lón de toneladas, dijo Ser­gio Bel­monte.

Ren­gel, por su lado, afir­mó que, en esta zafra, “los inge­nios, en gen­er­al, tuvieron pri­or­i­dad para mol­er las cañas que fueron afec­tadas por el frío para evi­tar su may­or dete­ri­oro, por lo que los rendimien­tos no cayeron tan­to”.

Los con­troles

En cuan­to a la labor del Ipaat, Bel­monte sos­tu­vo que viene tra­ba­jan­do de acuer­do a lo que establece la ley actu­al que ten­emos en Tucumán, emple­an­do las her­ramien­tas que están habil­i­tadas en ella, como los con­troles de molien­da, de lab­o­ra­to­rios indi­vid­uales y de exis­ten­cias y rendimien­to alco­hóli­co de las melazas, y fis­cal­izan­do la reten­ción de azú­cares para garan­ti­zar las exporta­ciones.

Por otra parte, señaló que, “si bien con­tinúa desar­rol­lán­dose vig­orosa­mente la pro­duc­ción de bioetanol, todavía sub­sis­ten las condi­ciones que dieron ori­gen al nacimien­to del Ipaat, en la medi­da en que se gen­er­an exce­dentes que deben reti­rarse del mer­ca­do inter­no”, sea medi­ante su exportación o, de acuer­do a la ley vigente, a través de su refundi­ción para la elab­o­ración de alco­hol una vez final­iza­da la molien­da.

En este sen­ti­do, destacó que “la prác­ti­ca del sec­tor, en los años pre­vios a la creación del Ipaat, fue la de fijar el exce­dente azu­carero que debía reti­rarse cada año del mer­ca­do inter­no, y que la inter­ven­ción estatal, hacien­do suya esa prác­ti­ca, procuró ase­gu­rar que los azú­cares exce­dentes fuer­an efec­ti­va­mente reti­ra­dos por los actores del sis­tema”.

Final­mente, el ger­ente del Ipaat eval­uó que el organ­is­mo fue con­sol­i­dan­do su accionar des­de su creación y que, ante los anun­ci­a­dos con­troles com­er­ciales que efec­tu­ará la Nación, nat­u­ral­mente desar­rol­lará una relación de coop­eración con los organ­is­mos fed­erales com­pe­tentes.

Fuente: La Gac­eta.