Sin créditos en 2019, la maquinaria agrícola no podrá recuperarse ni siquiera con una cosecha récord

El sector finaliza con una caída en sus ventas del 60% y con la cadena de pagos cortada

El Ban­co Cen­tral volvió a bajar la tasa de ref­er­en­cia quedan­do en prome­dio en un 59 por cien­to. En los últi­mas sem­anas acu­mu­la­da una mer­ma de 15 pun­tos. Sin embar­go este aún no se trasla­da a los ban­cos.

Des­de la con­sul­to­ra Rafaela Cap­i­tal, su direc­tor Fer­nan­do Camus­so señaló a BAE Nego­cios “que la baja de tasas es incip­i­ente dado que siguen reper­cutien­do en el mer­ca­do domés­ti­co puesto que hay tasas mucho más altas que el 59% en algunos casos y eso, es un prob­le­ma”.

Si bien se sabe que la tasa es endó­ge­na es decir no la pone el Cen­tral sino mas bien el mer­ca­do con ofer­ta y deman­da. Camus­so entiende que “sino hay una desin­flación en los próx­i­mos meses” no bajara la tasa “y ni hablar de que ven­ga un cisne negro en el frente financiero inter­na­cional que haga que vuel­va a subir el dólar”.

Com­pli­ca­do panora­ma para el sec­tor de maquinar­ias. Depen­derá mucho de la políti­ca mon­e­taria que siga desar­rol­lan­do el Cen­tral. Por lo pron­to, des­de la Cámara Argenti­na de Fab­ri­cantes de Maquinar­ia Agrí­co­la (Caf­ma), su pres­i­dente Raúl Cru­cianel­li recono­ció a este diario que “la ven­ta depende un 70% de los crédi­tos que dan los ban­cos a los pro­duc­tores”.

“La fal­ta de esta her­ramien­ta com­plicó a la indus­tria des­de mayo pasa­do lo que hace que ter­minemos con un 60% de caí­das sobre lo vis­to en 2017”, señaló el empre­sario.

El respon­s­able de Caf­ma admi­tió que el con­tratista es una pieza fun­da­men­tal en la adquisi­ción de la máquina. Des­de la Cámara de Con­tratis­tas de la provin­cia de Buenos Aires, su pres­i­dente Fredy Simone advir­tió que el sec­tor “está muy afec­ta­do por la fal­ta de crédi­tos y más aún con la baja de los cos­tos a la hora de cosechar dado que este no fue a la par del dólar. Esto hace que hoy este­mos descap­i­tal­iza­dos”.

Situación difí­cil. La indus­tria si bien reconoce que no hubo despi­dos si se ven cheques rec­haz­a­dos por fal­ta de fon­dos lo que hace que en algunos casos se corte la cade­na de pagos. Lo bueno es que no hubo despi­dos mas algunos empre­sar­ios con­sul­ta­dos “esper­an con ansias las vaca­ciones, las cuales durarán dos meses”. Es decir que los emplea­d­os no volverán a las fábri­c­as has­ta ini­cios de mar­zo. Para esa fecha ya se sabrá como sal­ió la cosecha de soja y maíz, cul­tivos que motor­izan la inver­sión.

En defin­i­ti­va “si hay una bue­na pro­duc­ción la indus­tria ayu­dará a que el sec­tor se mue­va, si por el con­trario la cosecha es mala ter­minare­mos por com­ple­to la activi­dad en 2019 y ni hablar si fal­tan los crédi­tos”, sen­ten­ció Cru­cianel­li.

Fuente: BAE Nego­cios.