La Liga bioenergética trabaja para una nueva ley de biocombustibles

Bionegocios — Las provincias productoras buscan consolidar una ley que de continuidad a las políticas de fomento para el sector.

La Liga Bioen­ergéti­ca, con­for­ma­da por varias Provin­cias pro­duc­toras de bio­com­bustibles, comen­zó a tra­ba­jar en la redac­ción de un anteproyec­to de Ley que pro­mue­va la con­tinuidad y pro­fundice las políti­cas de bio­com­bustibles enmar­cadas en la Ley 26.093, cuya caduci­dad será el 12 de mayo de 2021.

San­ciona­da el 19 de abril de 2006, la Ley 26.093 (y su nor­ma­ti­va com­ple­men­taria) estable­ció las mez­clas mín­i­mas oblig­a­to­rias de biodiesel y bioetanol en el gasoil y las naf­tas respec­ti­va­mente que se com­er­cial­izan den­tro del ter­ri­to­rio nacional. Ini­cial­mente, la mez­cla se fijó en el 5% para todos los bio­com­bustibles a par­tir del primero de enero de 2010. Luego esos por­centa­jes fueron incre­men­tán­dose has­ta lle­gar a los val­ores de hoy: 10% para biodiesel y 12% para bioetanol. En este últi­mo caso, se reparte en partes iguales entre el deriva­do de cere­al y el de caña de azú­car.

Para avan­zar con el referi­do anteproyec­to de Ley, la Liga Bioen­ergéti­ca des­ig­nará una comisión redac­to­ra que estará integra­da por cin­co miem­bros. En diál­o­go con Veron­i­ca Geese, Sec­re­taria de Esta­do de Energía de San­ta Fe, per­sona que coor­di­na la agen­da de esa orga­niación, man­i­festó que “se está bus­can­do que este anteproyec­to ten­ga un gran con­sen­so entre todos los actores”. Destacó que “se inten­tará afi­nar aspec­tos téc­ni­cos, cues­tiones oper­a­ti­vas e incor­po­rar el biogás den­tro del rég­i­men.” La políti­ca de bio­com­bustibles ha resul­ta­do estratég­i­ca para el país. Des­de su imple­mentación, ha per­mi­ti­do susti­tuir la importación de 9 mil mil­lones de litros de gasoil y 5 mil­lones de litros de naf­ta, lo que derivó en un ahor­ro de divisas por un val­or supe­ri­or a los U$S 6 mil mil­lones. En este lap­so, las exporta­ciones de biodiesel treparon a 15 mil­lones de toneladas, reg­is­tran­do ingre­sos supe­ri­ores a los U$S 13 mil mil­lones.

La pro­duc­ción de biodiesel es un impor­tante sostén para los pre­cios de la soja y su hari­na ‑el prin­ci­pal pro­duc­to de exportación argenti­no. Per­mite absorber el 30% de la pro­duc­ción de aceite y evi­tar que se des­tine a un mer­ca­do prác­ti­ca­mente sat­u­ra­do. Argenti­na es el prin­ci­pal expor­ta­dor mundi­al de aceite de soja, sien­do respon­s­able del 50% del com­er­cio mundi­al, donde la mitad de sus exporta­ciones tienen como des­ti­no a un úni­co país, la India.

Clau­dio Moli­na, uno de los prin­ci­pales colab­o­radores en la redac­ción de la Ley 26.093.

En el NOA, el bioetanol de caña se ha con­ver­tido en un impor­tante sus­ten­to para su prin­ci­pal sec­tor, min­i­mizan­do la necesi­dad de expor­tar los exce­dentes de azú­car a pre­cios por deba­jo de los cos­tos de pro­duc­ción. Sim­i­lar es el caso de las zonas donde se han insta­l­a­do las refin­erías de maíz. La may­or deman­da del cere­al ha lle­va­do a que los pre­cios se ubiquen muy por enci­ma de la pari­dad de exportación, tra­ducién­dose en ingre­sos adi­cionales a los pro­duc­tores locales.

La qui­ta de sub­sidios que el Esta­do Nacional aplicó al gasoil uti­liza­do en el trans­porte de pasajeros de cor­ta dis­tan­cia des­de el 1 de enero de este año ha des­per­ta­do el interés por el uso vol­un­tario de biodiesel ‑más baratos que sus equiv­a­lentes fósiles. Aunque la reglamentación vigente no impi­de el uso de may­ores cortes que los estable­ci­dos para las petrol­eras, existe un alto gra­do de con­fusión que difi­cul­ta su imple­mentación. Sobre este pun­to había comen­za­do a tra­ba­jar el Exsec­re­tario Igua­cel antes de su renun­cia. Mien­tras la fal­ta de defini­ción de parte de la cartera de Energía se dila­ta, siguen apare­cien­do pequeñas plan­tas mar­ginales sin los mín­i­mos req­ui­si­tos de higiene y seguri­dad. Muchas de estas ini­cia­ti­vas han sufri­do graves inci­dentes, algunos has­ta con víc­ti­mas fatales con este tipo de ini­cia­ti­vas.

Con la idea de avan­zar en mate­ria de reglamentación, rep­re­sen­tantes de La Liga Bioen­ergéti­ca estarán par­tic­i­pan­do en mar­zo de una mis­ión insti­tu­cional a Brasil donde bus­carán cono­cer en detalle la imple­mentación del pro­gra­ma Ren­ov­aBio (ver una políti­ca de esta­do en favor de los bio­com­bustibles en Brasil). Brasil es líder en el uso de bio­com­bustibles en trans­porte, con una par­tic­i­pación por enci­ma del 45% de etanol en el mer­ca­do de la gasoli­na y del 10 % de biodiesel en el de gasoil. Habi­en­do intro­duci­do este bio­com­bustible var­ios años más tarde que Argenti­na, hoy cuen­ta con un corte del 10%, que lle­gará al 15% en 2023.

El camino para insta­lar los bio­com­bustibles no fue nada fácil, recuer­da Clau­dio Moli­na, uno de los prin­ci­pales colab­o­radores en la redac­ción de la Ley 26.093. “Llevó var­ios años de tra­ba­jo alcan­zar el con­sen­so de todos los actores intere­sa­dos, pero final­mente se logró la san­ción de dicha Ley con un altísi­mo gra­do de aprobación leg­isla­ti­va, en un hecho históri­co.” De lograr con­sen­sos depen­derá el futuro de un com­ple­jo que en poco más de 10 años instaló 57 plan­tas — de las cuales más de 40 son pymes de cap­i­tales nacionales — en 10 provin­cias argenti­nas.

Fuente: Clarín.