YPFB sube compra de alcohol anhidro a 150 millones de litros para producir etanol en 2019

La compra de altos niveles de alcohol anhidro repercutirá en una menor subvención a los hidrocarburos, bajas importaciones de aditivos para producción de gasolina y un fuerte impulso a la industria nacional.

La Paz — Yacimien­tos Petrolífer­os Fis­cales Boli­vianos (YPFB) decidió casi duplicar el vol­u­men de com­pra de alco­hol anhidro pre­vis­to para 2019, de 80 mil­lones a 150 mil­lones de litros, con el obje­ti­vo de incre­men­tar la pro­duc­ción de etanol para el mer­ca­do inter­no, infor­mó este miér­coles el min­istro de Hidro­car­buros, Luis Alber­to Sánchez.

La autori­dad ade­lan­tó que “la próx­i­ma sem­ana” se fir­marán los con­tratos con cua­tro inge­nios azu­careros nacionales para garan­ti­zar el sum­in­istro de ese insumo.

“La proyec­ción de com­pra de alco­hol esta­ba esti­ma­da en 80 mil­lones para el 2019, pero esta­mos fir­man­do un con­tra­to para el año 2019 para com­prar a los inge­nios azu­careros 150 mil­lones de litros de alco­hol anhidro, prác­ti­ca­mente esta­mos dupli­can­do”, dijo a los peri­odis­tas.

Sánchez destacó que la com­pra de altos nive­les de alco­hol anhidro reper­cu­tirá en una menor sub­ven­ción a los hidro­car­buros, bajas importa­ciones de adi­tivos para la pro­duc­ción de gasoli­na y un fuerte impul­so a la indus­tria nacional, prin­ci­pal­mente en los cul­tivos de caña.

Añadió que la pro­duc­ción de etanol, como alter­na­ti­va de com­bustible, tuvo una gran aceptación en el mer­ca­do inter­no.

En noviem­bre de este año, YPFB comen­zó a vender en San­ta Cruz, Tar­i­ja, La Paz y Cochabam­ba el Súper Etanol 92 como alter­na­ti­va a la gasoli­na espe­cial, a 4,50 boli­vianos el litro.

El nue­vo car­bu­rante tiene 92 octanos, lo que per­mite may­or rendimien­to y cuida­do al motor de los vehícu­los, además de ser ami­ga­ble con el medioam­bi­ente, según la estatal petrol­era.

Por otro lado, el Min­istro de Hidro­car­buros anticipó que en enero de 2019 se pre­vé cer­rar acuer­dos para incur­sion­ar en la pro­duc­ción de biodiesel, cuya pro­duc­ción será par­tir de la soya y otras oleagi­nosas.

Fuente: La Razón.